P. Metodij fue a Podoline solo por un breve periodo de tiempo, porqué como viceprovincial de los redentoristas, era en numerosa ocasiones interrogado y llevado de un lugar a otro. En el mes de mayo lo condujeron a Leopoldov y de aquí a Baè. De la celda interrogatorio en Leopoldoc recuerda su cohermano y companero de prisión, que ha mandado información a los superiores de Roma después de su emigración: "en los meses de mayo y junio de 1959 cinco de nuestros padres P. Trèka, Fail, J.Ïirkaò, Szitas y yo) fueron llevados a los edificios adyacentes a la prisión y arrojados en la terrible cárcel de Leopoldov, donde hemos sufrido por casi 40 días en camisa y pantalones, con los pies descalzos, sin ningún trabajo, sin la s. misa ,breviario ni rosario, bajo una luz fuerte de día y de noche, cada minuto bajo la mirada de los peores guardias, sufriendo entre otros terribles interrogatorios durante el día y durante la noche con todos los métodos forzados, psíquicos e físicos juntos, que la moderna criminología comunista tenia a su disposición. Dicho humanamente, era casi insoportable. Cada momento deseábamos morir más bien que vivir. No sabíamos los unos de los otros. Por fortuna, tres días antes del arresto de todos los religiosos, hemos quemado casi todo el archivo viceprovincial, por lo que no tenían ningún documento encontrá nuestra, igualmente todos nosotros hemos declarado vagamente. Por lo que después de 40 días en la celda de interrogatorio hemos estado trasladados con los otros en el convento- cárcel".
En el mes de septiembre fue abolido el campo de internamiento de Baca y todos sus habitantes fueron transferidos a Podolinec.
De aquí el 25 de Noviembre de 1950 bajo la orden de la policía secreta del Estado de Presov fue preso de la celda de interrogatorio, pero en el mes de diciembre de 1950 era de nuevo en Podolinec. El testimonio ocular de los eventos ha escrito esto: " Pero de nuevo el 25 de noviembre del 1950 hemos estado ( P. Trèka, Fail, J. Ïurkaò, y yo) trasladados de Podolinec a Prešov en la nueva celda interrogatorio, donde hemos sufrido 30 días de grande tortura. Aquí , bajo la guardia de NKVD, era peor que en Leopoldov. Pero también en esta prisión nos ha ayudado claramente la gracia de Dios, y Navidad la hemos podido celebrar con los otros en Podolinec." Este continuo transferí mentó del campo al interrogatorio, con andada e retorno, contribuyeron ciertamente a debilitar físicamente y psíquicamente la salud del hombre más anciano. Pero su carácter equilibrado y su confianza en Dios lo ayudaban siempre a soportar también estas dificultades. El redentorista P.Michel Rusnak, más tarde obispo de Totonto, paso con el P. Metodij alguna semana en Podolinec. Durante este tiempo se da cuenta que el P. Metodij, después del SOC inicial por todo lo que había sucedido, se recupera y adquiere de nuevo su equilibrio espiritual y su buen humor. Se alegraba cuando los jóvenes cohermanos lo visitaban, y siempre les daba las cosas que el había recibido. Bromeaba con ellos, con el fin de que los cohermanos tuvieran buen humor y serenidad.
